El crecimiento reflexivo acerca de la familia, implica hablar de identidad; de intimidad, de interacción y parentesco, del pasado y la memoria de un núcleo a través del tiempo y del lugar en el que habita. La estructura familiar fundamental que afecta profundamente todas las esferas de la vida mexicana y en muchas ocasiones, de la incapacidad que tenemos para generar una crítica rigurosa debido a la invisibilidad de los cambios que manifiesta y las nuevas maneras de entenderla a ella y a sus elementos constitutivos, los cuales involucran una enorme posibilidad de lecturas, que pocas veces se comentan desde el quehacer artístico y cultural.

Los invitados al Diálogo son:

- Saraí Ojeda: Que considera al arte como un método de sanación. Y  que con su trabajo intenta forjar vínculos con el pasado, la memoria y el imaginario para conjugar otro tiempo: un momento fotográfico. Le interesa la fotografía como una variante de nuestra construcción personal y de nuestra propia interpretación de la realidad.

- Diego Moreno: Quién recorre los túneles de la representación del espacio doméstico como un lugar plagado de fantasmas que evocan la perturbadora historia de su familia, fusionándola con tradiciones prehispánicas y visiones apocalípticas de la religión católica, dentro del mapa profundamente complejo de la convivencia de culturas y creencias del México actual.

- Roberto Tondopó: Quien explora los tumultuosos capítulos que se viven en el paso de la niñez a la adolescencia, buscando la fusión entre la mirada infantil y la perspectiva adulta para llegar a la unión de su imaginario, la lucha por su independencia individual y la construcción de su identidad. 

Por ello es importante dar un vistazo al papel que funge la familia en la actualidad y cómo es que su reestructuración permea en el desarrollo artístico y social, a través de tres reconocidos fotógrafos de diferentes regiones del país.